Los interminables ataques terroristas que se sufren en La Araucanía desde hace décadas –muchos de ellos sin culpables- han llevado a que una de las prioridades del segundo gobierno del Presidente Sebastián Piñera sea modificar la actual Ley Antiterrorista junto con otras medidas que apuntan a entregar mayor seguridad y paz en la región. Si consideramos que el terrorismo se ha complejizado en sus formas de actuar y en sus métodos, uno de los mayores desafíos de este gobierno es poder estabilizar dicho concepto al punto de que sea reconocido y aceptado transversalmente por los legisladores para poder contar con una ley moderna y que permita eficacia a los jueces. Por eso, en este número analizamos lo que las diferentes instituciones internacionales y la literatura académica señala al respecto, junto con las indicaciones que propone el ejecutivo.
