Participación Femenina

SEÑOR DIRECTOR

Efectivamente es deseable una mayor participación femenina en política, pero el sistema de cuotas y escaños reservados no soluciona las trabas reales que tienen las mujeres a la hora de decir entrar en ella.

El principal inconveniente que tienen las mujeres es conciliar maternidad y familia con la política -y también con el mundo laboral-, por lo que si realmente se quiere incentivar una mayor participación debemos tener en cuenta cómo mejorar dichas vallas. Se debe apuntar a fortalecer la familia -y la cooperación mutua en las labores que demanda dicha institución- con herramientas que generen condiciones óptimas para que las mujeres tengan las mismas facilidades que los hombres.

Los escaños reservados para garantizar paridad de género son un mecanismo artificial que no soluciona la necesaria integración femenina. Además, distorsiona la esencia de la democracia, pues se pasa a llevar el principio de igualdad ante la ley y el derecho a elegir y ser elegido. Toda persona, independiente de su sexo, religión, origen étnico, debe tener las mismas posibilidades e incentivos de poder participar en política. Dicho esfuerzo corresponde al sistema político. El resultado de toda elección democrática, no obstante, depende de la voluntad de los electores.

 

Daniela Carrasco

Fundación Jaime Guzmán

Fuente: La Tercera