El estudio de la ley de migraciones en el Congreso Nacional ha tenido muchas dificultades. Prueba de ello, es que la Comisión de Gobierno Interior de la Cámara de Diputados –con los votos no oficialistas- aprobó una indicación que consagra el “Principio de no devolución”, texto que no contó con la venia del ejecutivo.
Luego de ello, se votaron dos artículos de gran importancia para la política migratoria. El primero, sobre “Acceso a la seguridad social y prestaciones de beneficio fiscal”, en que cualquier extranjero podrá recibir, desde el día de ingreso al país, beneficios financiados en su totalidad por el fisco, sin importar que no tenga su residencia definitiva en Chile.
El segundo, que trata la “Reunificación Familiar”, la cual quedó abierta para cualquier tipo de conviviente. Esto no se condice con los estándares internacionales, que exigen la acreditación de una relación con una persona que tenga efectos civiles equivalentes al Acuerdo de Unión Civil, para impedir la existencia de futuros fraudes migratorios.
Al parecer la oposición, al no poder consagrar el “Derecho a la Inmigración”, está haciendo todos los esfuerzos posibles para que, en los hechos, este derecho exista.
Hernán Valenzuela, El Mercurio de Antofagasta, 30 de julio de 2018
